5 cosas que no pueden faltar en mi lista de regalos

uuuiii... tanto tiempo sin escribir en este espacio que no sé ni por donde empezar. Tratando de encontrar ese tiempo divino y exclusivo, los días se fueron haciendo semanas, los semanas meses.. y los meses.. años!!. Todo sigue en mi cabeza, ordenado y re-escrito miles de veces. Ya saldrá. Ya habrá tiempo. "In the meantime.." como dicen los del norte para referirse a nuestro "mientras tanto", hoy sentí las ganas, no, mejor dicho, la necesidad de pasar por aquí. De sentarme un ratito y escribir; sin filosofías ni análisis profundos .. sólo lo que sale.. lo que el cerebro ordena a los dedos (estoy escribiendo en un teclado, no lo olviden!).

No sé porqué venía pensando hoy en los regalos ... (será por la proximidad a las fiestas? stop! ya dije que, al menos por este tiempo, sólo voy a escribir.. sin cuestionamientos ni análisis de paradigmas .. sólo escribir!). Sigamos. Venía pensando en los regalos .. en los regalos que me gusta recibir .. en esos regalos que si alguien te pregunta opciones, esas cosas estarían enunciadas. Venía pensando también en números: cifras, datos, estadísticas.. y eso me llevó a la planificación, planificación estratégica, lista de tareas, etc etc etc. Sí, así suelo ser, cuando algo se me mete en la cabeza lo mezclo con otras cosas que ya estaban metidas; o meto diez cosas a la vez. Sorry, soy geminiana. Dicen que hacemos muchas cosas a la vez. Y bueno, sirva todo este preámbulo como excusa para esta nueva entrada, la que espero inaugure una nueva etapa de reflexiones, de pensamientos.

Pero antes.. les cuento las 5 cosas que no pueden faltar en mi lista de regalos. :)

1) Un buen libro, de esos que tienen hojas y tapa; no me regalen una kindle o cualquier otra cosa electrónica para leer. Quiero sentir las hojas, estar en contacto con las palabras. Tema? Un poco de todo, pero tampoco todo. No se preocupen por comprar Harry Potter porque ya tengo toda la colección, como también los de Richard Bach y El Principito. No me gustan las novelas de amor; los clásicos pueden ser, pero no pierdan en tiempo en esas que luego una encuentra en la peluquería. Estoy tratando de terminar de leer la última obra de Carlos Paez Vilaró (sí! escribe! además de pintar esos soles hermosos). Ah! eso sí, muero por las novelas de Sidney Sheldon en inglés! Me leí casi todas, pero siempre es un deleite tener tiempo para volver a hacerlo. A Danielle Steel la traté de leer; pero salvo aquella de la casa en el monte o la del desayuno, no encuentro mucha emoción en sus páginas. Todavía no leí la vida de Steve Jobs, ese podría ser.

2) Velas aromáticas, esencias y sales.. cualquiera diría que este espacio lo auspicia Aroma&Body! :) .. pero bueno, es así, me gusta todo lo que ahí se vende. Las fuentes de agua (uno de mis regalos del día de la madre favorito!), las velas que te trasportan a diferentes lugares maravillosos de esta mundo .. o que te acercan a tus flores preferidas... de sólo escribir puedo sentir una vela con aroma a "playa" que justamente se me acabó recientemente. Cuando está prendida, puedo sentir mis pies caminando por la arena .. y hasta algún que otro sonido de algún delfín que se pasea por ahí. Y eso nos lleva al siguiente regalo!

3) Delfines. Amo los delfines! .. lastimosamente nací en un país mediterraneo, porque en determinado momento de la vida pensé fuertemente en estudiar psicología y especializarme en terapia con delfines. Hello! estamos en Paraguay. No es que pida que me regalen un delfín .. (aunque qué gusto daría!) .. pero bueno, no sé.. hay que ser creativos cuando se trata de regalos!! .. Tengo un CD con sonidos de delfines que lo tengo ahí, para esos momentos especiales, para cuando uno necesita regargar las energías y conectarse con la naturaleza. Hay un anillo con dos delfines entrelazados, .. mmm.. ese sería un regalo interesante!

4) CDs de música. La música no falta en mi día a día. Clásica, romántica, pop, lentas en inglés (de los 80 por favor!), jazz, una buena guarania, beatles, danzas, sinfonías, y todo lo que gire en torno a estos géneros. Beethoven, Mozart, Bvorak (nunca me acuerdo como se escribe!), Vivaldi, Hayn, un poco de los más contemporáneos puede ser, siempre y cuando tenga cuerpo y sentido; Regee (no TON, ese noooo), canciones infantiles: las amo! desdee siempre, y ahora que soy mamá doblemente. Peter Cetera, Reo Speed Wagon,Carlos Vives, Gloria Stephan, Fonseca, Enya... muero por ellos. Ya sé! se puede bajar todo en MP3! es más, hasta pueden ser tu backtone!. Pero no, no quiero escuchar en esas plataformas. Quiero mi CD, con su cajita, de esas que están tan gastadas de tantos abrirlas y cerrarlas. Y no se equivocan si me regalan soundtracks (bandas sonoras); tengo una colección interesante, la mayoría de películas que ví una y mil veces; desde Coyote Ugly, Footloose, My best friend weeding, Sex and the City, Full Monty.. hasta por supuesto, todas las de Harry Potter!!.

 5) Y finalmente.. este regalo es la clave de todos los regalos... es EL REGALO!. A ver a ver... redoble de tambores como decía ayer una amiga... el mejor de los regalos es... no se escucha los redobles... a verrrr ... siii.. el mejor regalo es... AQUEL QUE LA PERSONA ELIGIO PENSANDO EN VOS!. Sí sí señores; así de sencillo. Un chocolate, una bufanda, un lápiz, una flor, una canción. Sea lo que sea, algo que cuando vió dijo "este le va a gustar". Y no se me hagan los vivos. Lavarropas, secarropas, lavavajillas, etc etc no entran en este rubro. Claro que nos gustan! .. pero no como regalos (y menos en el día de la madre). Créanme. Los regalos se sienten. Se siente el cariño de la persona que lo eligió. Se siente cuando alguien se tomó el tiempo en preocuparse qué agradará a la otra persona. No hay nada peor (para mi al menos), que te regalen algo elegido por otra persona. O peor, que te regalen plata. Para eso uno trabaja, y puede comprarse lo que quiere. Pero el regalo no, es lo único que no podemos comprar. Podemos "regarlarnos"; es más, me encanta!... pero no podemos comprar el que otra persona piense en nosotros y nos regale en regalo perfecto. Y mejor aún si viene con un detalle sorpresa. Esos son los mejores regalos. Como cuando tu hijo te regala la taza que pintó con su profe de jardín; .. es la mejor taza del mundo! y la obra de arte perfecta. Bueno, así también cuando un adulto se esmera en hacer el regalo perfecto, uno lo atesora y vale más que cualquier otra cosa comprada sin sentido.

Y ahí están, las 5 cosas que no pueden faltar en mi lista de regalos!. Claro que me gustan las carteras, los zapatos, accesorios, perfumes (sobre todo 212 de Carolina Herrera, Amarige by Givenchy, Vanitas de Versache y  el eterno Eternity!!).. pero no muero por ellos. Mi salida perfecta a un shopping es si hay una juguetería y una librería. Claro que no me enojo si me quieren regalar un auto!! ... mmm.. aunque.. pensándolo bien, me corrijo. Eso lo puedo pagar, en diez mil cuotas, pero lo puedo pagar. Prefiero esa rosa roja finamente elegida.. o el desayuno de María Castaña, opción un buen paquete de chocolate. Para todo lo demás... !!! (jajaja.. MC! .. pero como no auspicia este blog, no pienso nombrarlo gratuitamente).

De Cancy Candy al Enfoque de Derechos

Hay cosas que definitivamente marcan la vida, recuerdos imborrables que pasan a formar parte de nuestro bagaje y van construyendo quienes somos; Candy Candy para mí es una de ellas. Aunque muchos creerán que tiene que ver con su eterna búsqueda del Príncipe de la Colina, su jardín de los rosales o sus amores imposibles, realmente otra cosa fue la marcó el antes y el después.

Aunque hasta ahora suspiro cuando recuerdo la mirada de Antony diciéndole "…eres mucho más linda cuando ríes que cuando lloras”, lo que definitivamente se convierte en el inicio del camino que hoy recorro tiene que ver con quién es en realidad Candice White Andrew, conocida por todas las niñas de época como Candy Candy. De pequeña fue abandonada, por lo que su única familia pasó a ser la Señorita Pony y todos los niños del orfanato donde, sin elección, tuvo que crecer. A partir de ese momento, mis muñecas se transformaron en los niños y niñas del orfanato, a las que yo ayudaba a encontrar una familia que los quisiera adoptar; o al igual que en la serie, los consolaba cuando al final del día de la visita se quedaban sin familia porque nadie los elegía. Lógicamente, en esa época -con 7 años- todo eso era sólo un juego: hoy, forma parte de lo que soy.

No es que hoy trabaje en algún hogar de niños; por el contrario, el paso de los años me enseñó que niños y niñas no deben crecer en instituciones (de hecho, no deberían ser abandonados!). Trabajo las 24 horas del día (y de la noche, como quien dice) para que nadie tenga que abandonar a sus hijos e hijas. Trabajo para que la gente entienda que niños y niñas tienen que crecer rodeados de amor, en el seno de una familia que los cuiden y los protejan. A qué me dedico? Eso no importa. Lo que importa es hacer que aquello a lo que uno se dedica contribuya a hacer de este mundo un lugar mejor; sobre todo para las niñas y los niños. Niños y niñas no merecen ayuda; ellos tienen derecho a la ayuda, tienen derecho a que los protejamos y cuidemos.

Asistencialismo vs Enfoque de Derechos, he aquí la cuestión. Ambos nacen en el deseo de ayudar a alguien, la diferencia está en cómo lo hacemos (y en cuáles son nuestras verdaderas intensiones, porque si se trata sólo de tener la conciencia tranquila, es asistencialismo y punto). Y no es que sea sólo un lenguaje de las ONGs. Debería ser un lenguaje de todos. De hecho conocemos el concepto, sólo que usamos diferentes palabras. Decimos siempre que no hay que dar el pescado, sino enseñar a pescar. Es lo mismo.

El asistencialismo es a corto plazo, no brinda soluciones, es más, sólo prolonga la pobreza y la necesidad. No aporta ningún valor realmente, más allá de cubrir la necesidad inmediata y hasta acallar conciencias. Hay situaciones en que pareciera ser importante, pero en la realidad enfatiza la brecha ricos/pobres y no nos lleva a ningún lado. Ya lo dice el refrán popular; sólo damos el pescado.

El enfoque de derechos, sin embargo, enseña a pescar. Igual ayudamos, igual hasta damos cosas, pero con otro enfoque, con otra mirada. El enfoque de derechos respeta la dignidad humana: niños, niñas, adultos son seres humanos tan iguales como nosotros, pobres o ricos, todos somos iguales. La comida que compartimos con ellos no es porque nos sobra y ellos no tienen (pobrecitos!), sino que si tenemos comida, es nuestra responsabilidad compartirla con aquellos que en ese momento no la tienen. Y no sólo eso, no nos podemos quedar con las manos cruzadas, desde donde estamos, desde lo que hacemos, debemos contribuir para que todos tengamos acceso a ella. Cuando hacemos las cosas con un enfoque de derechos buscamos soluciones a largo plazo, soluciones definitivas, que restituyan los derechos que han sido vulnerados. Y no lo hacemos solos, sino que nos unimos con aquellos que lo necesitan y trabajamos juntos en la búsqueda del bien común.

La Señorita Pony lo hacía de alguna manera con Candy y los niños y las niñas del orfanato; les daba todo el amor que alguien se los negó, y trataba por todos sus medios, de que vuelvan a tener una familia. En esa época no se hablaba mucho de los derechos. Pero ahora sí. Y ahí está la diferencia. En mi caso, las inmensas ganas de hacer algo por los niños abandonados que nació a partir de Candy Candy ha evolucionado hasta hacer que todo lo que haga en el día tenga un enfoque de derechos. He comprendido que el mundo no se cambia dando el pescado, sino enseñando a pescar. Y vos? Lo has hecho?


Rosanna E. Menchaca